Irán es un país que sorprende
y seduce al viajero. Los atractivos son incontables y colmarán con creces las
expectativas de cualquier visitante.
El paisaje variado, el clima benigno, antiguas y grandes ciudades, recónditas
aldeas, historia, arte, religión, gastronomía y por encima de todo sus gentes,
son algunas de las referencias que permiten disfrutar del viaje por las tierras
de la antigua Persia. Para poder dar
con la magia, el exotismo y la
esencia de Irán es importante acudir sin ideas prefijadas, hemos de permitirnos el placer de descubrir, así es como encontraremos
la esencia de este extraordinario país.
La herencia histórica dejada por el imperio persa a lo largo de los siglos la
veremos en lugares míticos. Ciudades fascinantes nos trasladan a los fastos de
las Mil y una Noches y a los tiempos de la Ruta de la Sed.